La crisis climática provocada por las personas se convertirá en catástrofe si no reducimos drásticamente las emisiones de gases de efecto invernadero. Queremos actuar con determinación contra el cambio climático y contamos con un plan ambicioso para reducir las emisiones de CO2.
Impulso de la movilidad eléctrica
Como la empresa innovadora que somos, apostamos por la movilidad eléctrica. Queremos que nuestros empleados y empleadas lleguen al trabajo en un medio neutro en cuanto al CO2. Nuestra sede se encuentra en el campo, lejos de la red de transporte público. Por eso, proporcionamos a nuestros empleados bicicletas eléctricas para que puedan llegar al trabajo de una forma respetuosa con el medio ambiente. El número de ciclistas supera al de conductores de coche, algo de lo que estamos orgullosos. Nuestra flota de vehículos de empresa también se está cambiando por una verde, con lo que fomentamos la movilidad eléctrica. Así, podemos reducir nuestras propias emisiones de CO2.
Responsabilidad ecológica en la ingeniería de molienda
La responsabilidad ecológica y el éxito económico van de la mano en Tietjen. Queremos cuidar los recursos y reducir continuamente el consumo de energía de nuestras máquinas. En uno de los sectores con un consumo de energía más intenso, apostamos por la eficiencia, una alta calidad y una vida útil prolongada de nuestras máquinas, nunca alcanzada en el mercado. «Vemos la protección medioambiental como un deber de toda la empresa», afirma Thomas Runde, director general de Tietjen. En el diseño de plantas se garantiza un consumo de energía mínimo mediante la combinación de componentes óptimos. Nuestros empleados trabajan en ello día a día con toda su experiencia y ahínco.