Un aumento de la competitividad a menudo solo se puede conseguir con costes bajos y una mayor calidad. Ambos factores se tienen en cuenta en nuestra optimización de plantas. En estrecha cooperación con nuestros clientes, mejoramos su planta y, con ello, todo el proceso de producción. Ya sea la eficiencia energética o una optimización técnica del proceso, buscamos soluciones en el ámbito mecánico, eléctrico o de tecnología de control de la planta.
Ejemplo: un motor nuevo suele ser alrededor de un cinco por ciento más eficiente que el modelo anterior. Con 7000 horas de servicio al año, la sustitución se amortiza al segundo año. Nuestros ingenieros examinan la situación particular de cada cliente junto con ellos. Para ello, nuestro equipo siempre analiza la situación y el sector de forma integral: ¿los requisitos relativos a la planta de molienda han cambiado con los años? ¿Hay grados de finura más altos, una distribución del tamaño de los granos definida, un cambio en la calidad de las materias primas o requisitos de capacidad más elevados? En caso afirmativo, ¿sale a cuenta una nueva planta o se pueden buscar soluciones más económicas mejorando componentes sueltos de la planta?
Por experiencia, la optimización de una planta puede ser una alternativa conveniente. Junto con los clientes, nuestros expertos elaboran una solución y estrategia personalizadas que aumentan su competitividad y la de su producción. Queremos sacar el máximo partido de tu planta y cumplir los requisitos del mañana. Con nuestra dilatada experiencia en ingeniería de plantas, desarrollamos soluciones individuales a la medida de tus desafíos.